De acuerdo al programa previsto, se inició la sesión y dio lectura a la resolución que aprobó el ingreso del Dr Rivera a la Academia Nacional de Ciencias. A continuación el nuevo Académico de Número presentó el trabajo “La investigación y publicación en psiquiatría en América Latina”. El nuevo académico hizo mención sobre la psiquiatría en América Latina que enfrenta desafíos en la investigación debido a los recursos limitados en los países de ingresos bajos y medios. La investigación en salud mental es necesaria para comprender los trastornos, las necesidades de atención y las políticas de salud pública. Para abordar estas brechas, llevó a cabo un estudio en nueve países de América del Sur. La mayoría de los participantes eran mujeres y tenían menos de cinco años de experiencia. Más de la mitad había recibido capacitación en investigación, pero solo una parte había realizado y dirigido proyectos de investigación. Las principales barreras fueron la falta de incentivos, apoyo financiero y tiempo. En cuanto a la publicación, la falta de tiempo, apoyo financiero y tutoría fueron las principales barreras. Se identificaron recursos como tiempo y tutoría, pero en general eran limitados. La formación en investigación se asoció con la realización y dirección de proyectos de investigación. Estos resultados resaltan la necesidad de superar las barreras y fortalecer los recursos para promover la investigación y la publicación en psiquiatría en América Latina.

El discurso de respuesta fue presentado por la Acad. Marion Schulmeyer, quien resaltó la trayectoria del Dr. Rivera y su amplia experiencia como médico psiquiatra en Bolivia. Posteriormente le fue impuesta la toga y ambas medallas de La Paz y Santa Cruz al nuevo académico, mereciendo aplausos de la audiencia.

Luego en el cierre de esta sesión de honor, la Presidenta de la Academia presentó el discurso de cierre en consonancia con el ámbito del marco institucional, sistema educativo y ciencia en Bolivia. Son 63 años que Bolivia había dispuesto seriamente erigir los cimientos para el desarrollo científico, al crear la Academia Nacional de Ciencias en 1960. Pero, la realidad es otra pues no se ha concluido con la definición institucional de leyes y reglamentos relacionados con la Ciencia y Tecnología; se carece de un fondo nacional destinado a la investigación científica y formación en postgrado de recursos humanos; el destino del PIB para C y T no pasa del 0.1% anual; el sistema educativo adolece de varias deficiencias en el desempeño por edad y especialmente en temas relacionados con materias científicas; la formación de nuevos profesionales a nivel universitario presenta limitantes económicas y de proyección; finalmente, el grupo crítico de investigadores científicos de Bolivia no es acorde a las necesidades establecidas para el desarrollo y avance del país, especialmente si se compara con otros países limítrofes. Sin embargo, este escenario ha desafiado a grupos de científicos para producir publicaciones y se destacan tres de las universidades públicas del sistema, así como dos universidades privadas; que procuran el registro de Bolivia en indicadores bibliométricos internacionales.

La ANC es consciente de esta realidad y por ello se consolidan sus objetivos en reconocer a profesionales investigadores en diferentes áreas de conocimiento, como una contribución a nuestra sociedad, como es incorporar en el grupo de académicos a científicos destacados de Bolivia. (Discurso ANC 12.6.23)

Adjunto Discurso a cargo de la Acad. Monica Moraes R.,PhD., Presidenta de la ANC Descargar